La Opinión. Publicación do día 8 de abril de 2019

Mayores que alzan la voz (08/04/2019)

Ocho coros universitarios sénior de España se reúnen este viernes en el Colón, donde actuarán en un encuentro organizado por la asociación coruñesa Adayeus

Miembros del Coro Universitario Sénior de Adayeus, la semana pasada. (Víctor Echave)

Alicia Pardo
Pertenecen a distintas ciudades de España, pero tienen dos cosas en común: la edad, situada ya por la parte alta de la tabla, y la pasión por el canto, que les hace llenar su tiempo libre de boleros, habaneras y foliadas. Son los coros universitarios sénior, grupos de hombres y mujeres que, una vez en la jubilación, dan rienda suelta a su gusto por la música, hasta entonces solapada por el tiempo que dedicaban a su profesión. Englobado dentro de la Asociación de Alumnos y Ex Alumnos de la Universidad Sénior (Adayeus), el de A Coruña reúne ahora en cada ensayo a antiguos profesores, médicos e incluso a maquinistas de locomotoras de vapor, que se plantan con ilusión frente a las partituras para ofrecer su mejor cara en el IV Encuentro de Coros Universitarios Sénior.
Este año, a los cantantes de Adayeus les ha tocado ser los anfitriones de la gala, que se celebra desde su formación en Oviedo de la mano de tres agrupaciones. Junto a los asturianos, serán siete las corales que participen en esta ocasión en el concierto, procedentes, además de A Coruña, de Ferrol, Vigo, Bilbao, Palencia, Valladolid y Burgos. El espectáculo, en el que interpretarán sus respectivos repertorios, comenzará a las 11.00 horas tras su apertura a cargo del alcalde. En total, desfilarán por el escenario cerca de trescientos cantantes, que entonarán letras de temas como Vizcaya, La golondrina, Hallelujah o Dispuesto a todo.
En su programa, el coro de Adayeus presumirá de acento gallego con un Alalá de Noia, una Foliada do Salnés y las melodías de Cantando O Xote. Habrá también sitio en el repertorio para el toque anglosajón con Hush, somebody's is calling my name, que no asusta a un grupo, como asegura su vocal José Manuel Álvarez, acostumbrado a la mezcla más absoluta de estilos. Sus miembros, además, llevan tiempo calentando las cuerdas vocales para el concierto que ofrecerán en el teatro. Entre su alrededor de 40 integrantes, no son pocos los que se sirven de las nuevas tecnologías para enviarse fragmentos de las obras, que ensayan en casa para arañar más tiempo de práctica a los ensayos programados.
"Yo estoy convencido de que sanamos enfermedades, porque la gente se lo pasa en grande. A parte de disfrutar, con estos encuentros lo que buscamos es conocer sitios de España e intercambiar métodos de enseñanza para mejorar las distintas formaciones ", explica el presidente de la asociación, Roberto Pérez, que reconoce que en estas galas se genera cierta "competencia sana" entre los grupos, que intentan "dar lo mejor de sí". "Será la primera vez que participe Vigo, pero esto no es como en el fútbol. Nosotros tenemos una buena relación", añade entre risas.
El arte de no frenar la marcha
El director de Adayeus se declara dispuesto a ofrecer en el acto una imagen de A Coruña que deje "con ganas de volver" a sus visitantes, a los que agasajará con "detalles" y una comida gallega tradicional. Entre pulpo y laconadas se decidirá cuál será la sede del próximo encuentro, al que los coristas coruñeses esperan poder volver a sumarse.
El coro es solo una de las muchas actividades de Adayeus, que ofrece un programa de reuniones, clases y salidas culturales a cualquier interesado, con los únicos requisitos de ser mayor de 50 años y estar ya en la jubilación. Actualmente, la entidad cuenta con 450 socios, que pueden cursar materias como sociología, psicología, economía o filosofía de la mano de personal docente de la Universidad de A Coruña.
La demanda es tan grande que, asegura Pérez, "hay peleas por entrar", para frenar con formación el anquilosamiento que puede traer consigo la vejez. Más allá de los libros, la asociación ha realizado este año visitas al castro de Elviña, el Camino de Santiago y el Palacio de Capitanía, y prepara una comida con baile para mayo con motivo de la celebración de fin de curso.